miércoles, 10 de septiembre de 2014

¿Estadistas o estadísticos?

"No tenemos estadistas sino estadísticos"... La frase es de Almudena Negro, y la pronunció ayer durante la conversación de análisis político de alto nivel que mantuvo con José Javier Esparza en el informativo de Intereconomía, justo antes de El Gato al Agua...

Es evidente el desconocimiento de la realidad social, la falta de percepción de los problemas, el desprecio de los ciudadanos de casi todos nuestros cargos políticos, y no me refiero solo al Gobierno, principales partidos, cargos públicos importantes... Me refiero también a la inmensa élite oligárquica que todo lo controla y de la que forman parte, también, sindicalistas, financieros, directivos de grandes empresas, catedráticos y profesores de Universidad y hasta los periodistas serviles, todos ellos dispuestos a renunciar a todo atisbo de dignidad y decencia con tal de seguir viviendo del Estado de la Corrupción... Las únicas medidas que han tomado nuestros insulsos líderes van encaminadas a mantener su poder, no a regenerar unas instituciones podridas de corrupción.

Un ejemplo de este verano basta para reflejar la realidad. Un asesor, una cena, una discusión: la economía va bien, afirma el político ufano. El resto de los comensales niegan la mayor: las cosas siguen muy mal. Llega septiembre, 97000 afiliados menos a la Seguridad Social. El asesor no comprende nada y encima dice sorprenderse... Como si las terrazas y chiringuitos abrieran también en otoño.

La estadística es una ciencia -relativamente, podría debatirse- basada en el cálculo de probabilidades y que utiliza herramientas matemáticas para llegar a conclusiones que pueden ser absurdas caso de no aplicar el sentido común más elemental. Todo el mundo conoce el ejemplo del pollo que se come uno en una población de cuatro: el estadístico podrá llegar a afirmar que los cuatro comieron su parte proporcional, cuarto de pollo... Es decir, nada que ver con la realidad...

Pero he aquí que nuestra casta gobierna datos, números, que encima manipulan a su antojo. Así, no comprenden que años de mentiras y corrupción, décadas de estafas e impunidad, acaben por aupar a las instituciones a un peligroso ejemplar defensor de la peor ideología que inventara la humanidad porque sale en sus televisiones. Aún creen que pueden seguir mintiendo y robando y, aunque sigan mirando las estadísticas y cocinándolas, como carecen del sentido común más elemental y sus sueldos de asesores les impiden ver la situación social de millones de compatriotas, seguirán conduciéndonos al abismo. Pero de fomentar una sana regeneración o fuerzas políticas sensatas que la impulsen, nada. Siguen creyendo, porque no son estadistas sino estadísticos, que un punto porcentual del PIB puede incrementar sus votos en una proporción muy importante, pero lo que seguro es real y no un cálculo estadístico, es que los ciudadanos están hasta las narices de los corruptos de todos los partidos. Lo que define -al 100% cabe afirmar- a un vividor del régimen, sea en la política, la prensa, la banca o los sindicatos, es que es capaz de destruirlo todo con tal de seguir en su puesto.






5 comentarios:

  1. En el mismo momento en el que se han corrompido así mismos y a la mitad de la población, y han acojonado a la otra media que roban para ellos, mediante violencia parapolicial, nutrida con gente sin escrúpulos a la hora de violar leyes y derechos, entre uniformados y encapuchados, con métodos criminales; repito: criminales; estamos merecidamente vencidos en cuanto que hemos permitido ser despojados del estado de bienestar y del ordenamiento jurídico que lo garantizaba, cediéndolos a ladrones y sinvergüenzas. Nuestra situación es merecida, por cederles y facilitarles el camino al crimen organizado que ocupa nuestro estado, que marginados de nuestro ordenamiento constitucional, hacen uso bastardo de nuestros recursos, leyes y garantías. No solo es la casta la que practica y apadrina la corrupción, traición y omisión. Sumemos a la casta una gran masa de población civil y todos los garantes omisos o corruptos, desde el Jefe del Estado hasta Judicatura, pasando por defensores del pueblo, de consumidores, de pacientes, sindicalistas, FAs, FSE...

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  2. Las estadísticas no se rompen con nuevos datos, se enriquecen. La estadística es una ciencia para ser usada por profesionales objetivos, no por intereses de quien te encarga el trabajo. El ejemplo del pollo es cierto, no es un error, si hay 400 habitantes cuantos pollos necesito? Aunque no todos coman pero sabemos cuantos pollos necesitamos.

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  3. De acuerdo con su artículo. La independencia de Escocía está limitada por la obligación que tiene de pertenecer a la Commonwealth Los países de dicha organización nunca tienen problemas como los demás:ni guerras, salvo las de la metrópoli, ni comunismo ,ni terrorismo ¿por qué? creo saber la respuesta y me gustaría comentarla con alguien de su equipo.






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